Casi dos horas y media de relajación y disfrute tanto para los protagonistas de la película, como para los afortunados espectadores que puedan verla.

Un masaje, ya sea para un cuerpo masculino o femenino, siempre relaja y tonifica, pero cuándo las manos del masajista o de la masajista se distraen y se deslizan por las partes más íntimas del cliente, la sensación de bienestar aumenta considerablemente, hasta el punto de participar plenamente en las satisfactorias consecuencias. Calor corporal, cuerpos unidos e intercambio de fluidos.

Relajante, caliente y didáctica.